Hace poco oí a un tertuliano en un evento de proptech decir que poco aportaban nuevo las startups de proptech. Y a otro le oí decir que sólo se dedican a poner tecnología… ¿Perdona? Claro que ponen tecnología. Y claro que se dedican a digitalizar todos los procesos inmobiliarios, por muy pequeños o específicos que sean, dentro de todo el proceso completo de alquiler o venta. Pero, además, reducen los tiempos de ejecución de las tareas y, lo más importante, ponen puentes tecnológicos entre todas las partes, independientemente de si son propietarios, compradores, inquilinos o intermediadores.
Estas pequeñas proptech están ayudando a producir un cambio significativo en el sector, aumentando la productividad de los ciclos o procesos, incrementando la transparencia de las operaciones (aunque nunca serán del todo transparentes si la administración no hace públicos los datos de manera masiva, utilizando tecnología). Así que, desde aquí, pido un aplauso a todos estos pequeños emprendedores que, llenos de entusiasmo, ponen su granito de arena para cambiar el sistema.
Otra cosa es saber si todas estas proptech van a ser capaces de sobrevivir, porque su nicho de mercado sea demasiado pequeño, porque no han hecho un buen análisis de mercado, porque no hay mercado suficiente, porque no tienen financiación… En fin, muchas opciones se acercan siempre al fracaso. Todas estas incógnitas, como ya hemos dicho otras veces, llevará a algunos players a unirse a otros más grandes o a formar conjuntos de compañías que unidas cubren o completan un pequeño proceso inmobiliario, como por ejemplo, la gestión de un alquiler (ya hay unas cuantas pequeñas plataformas maravillosas).
Y por fin llegamos a la respuesta a la pregunta: si ‘disrupción’ es cambiar la forma en la que hacemos las cosas, podríamos decir que todavía no se ha inventado la “segunda rueda”. Hacemos lo mismo, pero más digitalmente. Es verdad que la administración ayuda poco si nos hacen pasar por notarios y registradores, si para una hipoteca hay que cumplir unos requisitos marcados por el Banco de España, etc.
En resumen, no hay mucha disrupción… ¿o sí? ¿Comprar un inmueble mediante la tokenización de la deuda es disrumpir? Yo creo que sí, cambiamos por completo la forma de comprar, incluso transformamos un activo inmobiliario en un activo financiero… Más transformación que esa…
Dentro de nada vamos a sorprendernos sobre cuántas cosas vamos a tokenizar en el sector inmobiliario. Se ha abierto una puerta y mucho va a pasar por ahí. ¿Para cuándo la siguiente puerta?
Director de Operaciones del Grupo API en Cataluña, Tecnoapi y Mapa Proptech. Co-autor del libro Revolución Proptech, centrado en la transición de modelos convencionales hacia los digitales.