España sigue siendo, a pesar de la crisis, un destino de capital extranjero muy atractivo. En este contexto, Madrid y Cataluña han sido las comunidades autónomas con mayor poder de atracción. Aun así, esta inversión ha sido desigual en ambos territorios, siendo Madrid la que se ha llevado el 80% de estas operaciones. Cataluña, por su parte, comenzó decayendo un 18% durante los primeros trimestres, pero al cierre del año se situaba en valores parecidos al 2019, sólo con un 3% de variación.
Durante los primeros nueves meses de 2020, las inversiones en el sector industrial han representado un 31,1% del total. De ellas, la mayor parte fueron destinadas al sector de la alimentación y bebidas. Y es en Madrid y en Cataluña donde se encuentran las empresas que tienen los mayores volúmenes de facturación.
Disparidad entre comunidades
Desde el Departament d’Empresa de Cataluña indican que esta tendencia a la baja en la comunidad es puntual y refleja la tendencia del mercado mundial, que ha decaído un 49% el primer semestre del año. También recuerdan la trayectoria ascendente de los últimos años, donde las inversiones crecieron un 39,2% respecto el quinquenio anterior. “De hecho, las empresas internacionales siguen eligiendo Cataluña para construir sus nuevos hubs tecnológicos y es aquí, en el ‘Silicon Valley’ de Europa, donde prevemos las mayores oportunidades de inversión”, ha declarado Raisa Venermo, socia fundadora de la asesoría para inversores extranjeros Avalanding.
No obstante, esta disparidad de datos entre ambas comunidades presenta algunas fisuras por cómo el Ministerio de Industria contabiliza las inversiones: “este análisis debería realizarse en periodos más largos, lo que ayudaría a reducir el margen de error. Por ejemplo, las inversiones extranjeras se imputan a la sede fiscal, no donde realmente se ubica el negocio, y con la crisis política del 2017 Cataluña sale perjudicada”, ha asegurado Venermo.
Redactora en Por metro cuadrado