La forma de adquirir una vivienda se ha modificado significativamente en los últimos años. Y no es de extrañar, ya que tanto el sector como las necesidades de los clientes han cambiado también.
La gran profesionalización del sector y su apuesta por la innovación y la digitalización es una de las claves de estos cambios, ya que afecta de forma directa a las distintas áreas de negocio de las compañías. Así, en el ámbito comercial, hemos experimentado un enorme desarrollo, que nos ha permitido conocer más y mejor a los potenciales compradores, pudiendo ofrecerles así viviendas que se ajustaran mejor a sus necesidades.
Precisamente esas necesidades de los clientes también se han modificado tras la pandemia que hemos vivido en los últimos años. Así, desde Habitat Inmobiliaria, conscientes de la importancia de detectar estas necesidades para poder ofrecer un producto de calidad y adaptado, hemos hecho un análisis que recoge las características principales de la demanda actual de los compradores (entre las que se encuentran, por ejemplo, la valoración de los espacios exteriores o la priorización de la luz natural). Este análisis nos ha llevado a desarrollar COHABIT que propone una adaptación de las características de todas las promociones que desarrollemos desde Habitat Inmobiliaria, para dar así respuesta a estas nuevas demandas.
«La estrategia comercial de las promotoras debe apostar, tanto en el mundo físico como en el online, por ofrecer una experiencia única desde el primer momento, en la que se unen lo racional y lo emocional».
Además de las circunstancias derivadas de la pandemia, podemos ver que los propios clientes y su forma de enfrentarse a la compra de una vivienda han cambiado. El sector inmobiliario no es ajeno a un mundo en el que estamos permanentemente conectados y en el que la información está en la palma de la mano. Así, desde las promotoras vemos cómo, cada vez, los interesados llegan a las oficinas de venta de nuestras promociones más informados, demandando algo más que un listado de características. La experiencia se han vuelto clave también en el sector inmobiliario. La compra de una casa tiene un claro componente racional, pero no podemos desdeñar el componente emocional que supone. Se trata de una de las mayores inversiones de la vida de una persona que está adquiriendo, no una vivienda, si no un hogar. La estrategia comercial de las promotoras no puede ser ajena a esta realidad, sino que debe apostar, tanto en el mundo físico como en el online, por ofrecer una experiencia única desde el primer momento, en la que se unen lo racional y lo emocional.
Para dar respuesta a esta realidad, las compañías estamos desarrollando nuevas herramientas y formatos, pero también adaptando y mejorando aquellos ya existentes. Un ejemplo de ellos pueden ser las tradicionales ferias inmobiliarias o los puntos de venta físicos, que han ido evolucionando e innovando constantemente para mantener su papel de referencia en el sector, aportando un contacto directo con el público, que nos permite conocer de primera mano sus necesidades, preferencias e inquietudes. Pero esta cercanía física se complementa también con la apuesta por la estrategia digital que permite generar intereses y ventas, pero también acompañar a nuestros clientes desde el momento de la compra de una promoción hasta la entrega. La realidad virtual, las visitas 360º, los vídeos e infografías, los time-lapse, … Todo ello permite a los interesados poder conocer al detalle su futura vivienda y a los clientes seguir el proceso de una forma confiable e ilusionante.
Con todo ello, es innegable que el sector está en constante cambio y adaptación. Pero se trata de un cambio necesario para continuar manteniendo lo más importante: el acompañamiento, la personalización y la proximidad.
Directora comercial de Habitat Inmobiliaria